Escucho la frase
de Ovidio: “"La esperanza hace que agite el naufrago sus brazos en medio
de las aguas, aun cuando no vea tierra por ningún lado”. Es esa frase la que me
lleva a escribir “ algo” como me
pidió mi amigo Juan David Martin para
ese informativo, blog, proyección , anhelo, deseo , divertimento y desde mi punto de vista TRABAJO que el blog: “Circoolimpico”. Reciclar, palabra de moda, pero que debe ser
una realidad. España es un país con porcentajes correctos en materia de reciclaje en los diferentes sectores. La
población ha sido concienciada, nuestros alumnos han sido formados y continúan
formándose en su proceso educativo, la gente de mayor edad demuestra estar
concienciada en los diferentes procesos de reciclaje.¿ Son los Juegos Olímpicos un escaparate perfecto para concienciar y continuar esta
labor de concienciación? Desde mi humilde punto de vista SI. Pero un SI, sin
demagogia , con hechos y sobretodo con actitudes . La actitud se presupone ,es
un evento mundial como son unos Juegos Olímpicos, pero ...¿ y los hechos más
allá de la galería y cubrir el expediente ante el mundo?
Leyendo la prensa
, escuchando radio , viendo noticias televisivas , navegando por la red, mi
opinión es que el esfuerzo se ha realizado. Evidentemente todos tenemos
nuestras opinión , “constructiva claro”. Existen datos que demuestran al menos
esta idea de los organizadores de los Juegos Olímpicos de Londres por hacer las
cosas bien, o al menos cada vez menos mal ( que en nuestro tiempo ya es mucho).
La esperanza que abren estos Juegos es la esperanza de que en estos eventos la educación medioambiental sea un eje principal, aunque en la actualidad no veamos tierra por
ningún lado.
Como
el movimiento se demuestra andando, ahí van unos datos.
Comenzamos
afirmando que la mismísima llama olímpica emite cero emisiones de carbono.
Las
aproximadamente 300 camas luminosas que
formaron parte de la ceremonia de
inauguración de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 serán donadas a hospitales
en Túnez. Donadas por la empresa Tait Technologies a los hospitales Habis
Burguiba De Medenine y Taouine, en Túnez.
Las botellas de bebidas consumidas
durante las Olimpíadas estarán de
nuevo en los supermercados de Londres
para los Paralímpicos.
Los envases serán reciclados en la mayor planta de su tipo en el mundo,
inaugurada este año en Inglaterra, en un proyecto conjunto de la compañía ECO
Plastics y la empresa Coca Cola.
En la instalación se clasificarán y
reciclarán cerca de 2.500 toneladas de botellas de plástico por semana.
A
los que pasean hoy por el verde impoluto del Parque Olímpico les costaría creer
que hace tan sólo unos años, todo aquello era un vertedero industrial. La zona
de Stratford, al este de Londres –donde ahora se encuentra el estadio, el
centro acuático y el velódromo era un área equivalente a 297 campos de fútbol,
llena de escombros y en la que apenas se apreciaba el río Lea.
Tal y como explica David Stubbs,
director de Sostenibilidad del Locog, se reconvirtieron más de 45 hectáreas de
tierra para poder atraer a la fauna silvestre, se crearon 25 kilómetros de
senderos y ciclovías; se plantaron 4.000 árboles, y se restauraron cinco
kilómetros de río. Los cañaverales, pastizales y lagunas están llenos de
animales que hacía décadas no se dejaban ver por los alrededores de la capital.
Además, la ampliación del río, las defensas naturales y los sistemas de drenaje
han dotado a esta zona de resistencia para que se reduzcan posibles efectos del
cambio climático, como el aumento del nivel del mar.
«Tanto en las tareas de demolición como en las de construcción del Parque Olímpico, se superó la meta de reutilizar y reciclar el 90 por ciento del material derruido», matiza Stubbs. Esto incluye el estadio, que cuenta con un techo formado por 2.500 toneladas de tubos de acero que anteriormente se usaban como tuberías de gas. El velódromo tampoco se queda atrás, ya que el cien por cien de la ventilación es natural y el agua de lluvia recogida en la parte superior se utilizará para los baños y el riego.
El pabellón donde se celebrarán los
partidos de baloncesto y balonmano es una carpa cubierta de PVC reciclable, que
será desmantelada tras los Paralímpicos para poder ser reutilizada en Río de
Janeiro en 2016.
Las instalaciones acuáticas donde se llevará a cabo la
competición de waterpolo, justo igual que la pista de hockey, que lejos de ser
verde (como toda la vida) será azul y rosa. La Copperbox (caja de cobre), donde
se jugarán las fases iniciales de balonmano está hecha de materiales
reciclados.
El
60 por ciento de los materiales de construcción fueron entregados por
ferrocarril o por buques a través del río, reduciendo así el movimiento de
vehículos y, por tanto, la producción de CO2.
Estos Juegos serán también los primeros en medir la «huella de carbono». El
objetivo es reducir la cifra al equivalente a retirar 65.000 coches de la
carretera durante un año. «Nuestro propósito es asegurar que un millón extra de
traslados se hagan andando o en bicicleta cada uno de los días que dure la
competición», explica Stubbs. La ruta clave, la denominada «vía verde», también
ha utilizado material rescatado de la demolición.
Con respecto a la parte culinaria,
el Comité ha hecho firmar a todas las empresas de catering un estricto
reglamento para que no haya ningún problema a la hora de servir los 14
millones de comidas elaboradas a partir de fuentes sostenibles. Las
herramientas para la comida, como tazas de café y cubiertos (hechos con
materiales compostables) tendrán una
franja color naranja e irán en el cesto de basura de ese mismo color. Con esos
residuos se planea hacer compost. Los plásticos se
identificarán con color verde e irán al cesto del mismo color, luego serán
llevados para continuar el ciclo y convertirse después de reciclarse, en nuevas
botellas plásticas. Y aquellos residuos no reciclables irán en el cesto color
negro, con ellos planean generar energía para la ciudad. Todo para conseguir
unos Juegos «cero residuos».
Finalmente creo que podemos concluir afirmando con rotundidad:” Londres ha
conseguido ya primera y propia presea dorada.”
@lucerodelalbaluzbel